El día 1 de enero de 2016 entró en vigor la reforma fiscal que afecta a la tributación de determinados trabajadores autónomos. Supone nuevas obligaciones para más de 250.000 negocios que antes tributaban en algunos epígrafes de actividades a través del Régimen de Estimación Objetiva (“Módulos”).
Con el fin de ayudarte como autónomos a entender las diferencias en la tributación entre un modelo u otro, Sage ha desarrollado una herramienta online con la que podrás averiguar si te afecta y, si es así, de hacer el cálculo de estimación directa simplificada o normal de forma inmediata. De esta manera, obtendrás los resultados para tu caso concreto de cómo te afecta la reforma al IVA o al IRPF y qué régimen de tributación es más beneficioso para ti, si puedes elegir.
¿Cómo funciona la herramienta de cálculo de estimación directa de Sage?
Para hacer la comprobación, esta calculadora online te preguntará algunos datos básicos en relación con las novedades introducidas: si la facturación de tu negocio supera los 250.000 euros anuales, si emites facturas de más de 125.000 euros, o si la actividad económica a la que te dedicas es una de las afectadas por la reforma.
Una vez que la herramienta te confirma que debes cambiar el sistema por módulos, te damos la posibilidad de calcular de forma rápida y sencilla cuánto tendrás que tributar con el nuevo sistema de Estimación Directa, teniendo en cuenta tus datos del IVA e IRPF trimestral del año anterior y los importes de los gastos y las ventas trimestrales según su IVA u otros impuestos.
¿En qué consiste la reforma y qué cambios conlleva?
La reforma establece que los autónomos que entren bajo los siguientes supuestos tendrán que tributar en Régimen de Estimación Directa:
- Los autónomos que facturen más de 250.000 euros al año.
- Aquellos que realicen gestiones económicas por más de 250.000 euros (sin incluir la adquisición de inmovilizado).
- Todos los autónomos que se dediquen a las actividades descritas en el listado del siguiente enlace.
La consecuencia más inmediata, es que los autónomos deben llevar un control más exhaustivo de su contabilidad. Esto se debe a que esta nueva reforma exige la declaración trimestral obligatoria del IVA (modelo 303) y del IRPF (modelo 130), cuyo plazo de presentación correspondiente al primer trimestre termina el día 20 de abril y así sucesivamente cada trimestre. De forma adicional, también tendrán que presentar resúmenes anuales de IVA e IRPF a principios del año siguiente, entre otros puntos importantes introducidos en el reglamento que regula la actividad de los autónomos.
Es evidente que el Régimen de Estimación Directa supone la necesidad de llevar un registro mucho más eficiente sobre los ingresos y los gastos de una empresa, con lo cual, también conlleva que el trabajador autónomo le tenga que dedicar más tiempo. En estos casos los programas de facturación online como Sage One demuestran ser de gran utilidad, pues permiten aligerar esta carga de trabajo, gracias a la automatización de muchas tareas de contabilidad y la facilidad de uso.
Fuente: Sage One